Según los últimos datos, la inflación de la eurozona subió hasta el 2,2 % en septiembre, dos décimas más que en agosto. En el caso de España, la inflación cerró el mes pasado en el 2,9 %, también dos décimas respecto a agosto. ¿Cómo pueden afectar estos datos a los tipos de interés del BCE en octubre?
La inflación de la eurozona subió hasta al 2,2 % en septiembre y la de España hasta el 2,9 %.
Es probable que el BCE no haga cambios en los tipos de interés en octubre, dado que la inflación está cerca de su objetivo.
La incertidumbre sobre el crecimiento económico también empuja a la entidad a mantener los tipos.
El aumento de la inflación en la eurozona aleja el objetivo del BCE de mantenerla en el 2 %. En España ese objetivo está todavía más lejos, al haber subido hasta el 2,9 %. Lo más probable es que no haya cambios en los tipos de interés del BCE, tampoco en el tipo de interés de la facilidad de depósito que marca las rentabilidades de los productos de ahorro.
Además, aunque los depósitos y las cuentas de ahorro subiesen los intereses que ofrecen, en términos reales los ahorradores obtendrían lo mismo o incluso perderían por el aumento de los precios.
También es importante observar la inflación subyacente, que excluye la energía y los alimentos por su volatilidad. Aunque se mantiene relativamente estable, muestra signos de que la presión de los precios en el sector servicios no ha desaparecido por completo.
Para los ahorradores, esto significa que el tipo de interés de la facilidad de depósito actual podría traducirse en un rendimiento neto por debajo de cero.
En julio y en septiembre, el BCE decidió mantener los tipos sin cambios. El Consejo de Gobierno señaló que la inflación está en torno al objetivo a medio plazo y que las decisiones futuras dependen de los datos.
Los analistas sugieren que el ciclo de flexibilización del BCE probablemente terminará antes de 2025, en parte debido a las crecientes presiones inflacionistas. Algunas instituciones financieras, entre ellas Goldman Sachs y BNP Paribas, asumen que no habrá más recortes de tipos este año.
Es probable que no haya cambios en octubre porque un recorte del precio del dinero podría aumentar el riesgo de que la inflación se descontrole. En cualquier caso, el BCE sigue siendo flexible: si el crecimiento económico se debilita o la inflación cae de forma estructural, podría plantearse un tipo de interés más bajo.
No se espera que los tipos suban en octubre. El verdadero desafío es que, con una inflación en torno al 3 %, es probable que el rendimiento real de los ahorros siga siendo negativo.
Los ahorradores pueden considerar contratar depósitos con plazos de dos años o más, que suelen ofrecer rentabilidades más altas que los depósitos a plazos inferiores o las cuentas remuneradas.