Antes de lanzarte a invertir, debes tener ahorros suficientes y un fondo de emergencia.
Si no tienes formación o experiencia, elige instrumentos financieros de menor complejidad y riesgo.
Para invertir tus ahorros con poco riesgo puedes optar por productos de inversión como la deuda pública o los fondos de inversión de renta fija.
Tus ahorros tienden a perder valor con el tiempo debido a la inflación, que es la subida general de los precios de los bienes y servicios. Esta subida hace que puedas comprar menos con la misma cantidad de dinero.
Al invertir tus ahorros, la meta final es obtener una rentabilidad que compense esa pérdida de poder adquisitivo, para que así, al añadir los intereses a tus ahorros, tengas la misma capacidad de compra aunque los precios sean más altos.
Si no tienes experiencia en el mundo de la inversión, puedes optar por inversiones de bajo riesgo o productos de ahorro. Pero antes de hacerlo, asegúrate de cumplir con los siguientes puntos:
Tener ahorros: invierte con fondos propios que no necesites en tu día a día y no te endeudes.
Contar con un fondo de emergencia: ten un colchón financiero que puedas utilizar en situaciones inesperadas, por ejemplo, si se te rompe la nevera y necesitas comprar una nueva.
Pensar a largo plazo: toda inversión entraña un riesgo por lo que no debes usar dinero que necesites a corto o medio plazo.
Antes de ver dónde y cómo invertir los ahorros, hay algunos aspectos que debes tener en cuenta para definir tu perfil de inversor:
Liquidez: un activo líquido será más fácil de convertirse en dinero, aunque los activos financieros líquidos suelen ofrecer menos rentabilidad. Si crees que puedes necesitar tus ahorros en cualquier momento, opta por activos líquidos.
Rentabilidad y riesgo: normalmente, a mayor riesgo, mayor rentabilidad puede ofrecer una inversión, y viceversa. Si eres un inversor conservador con alta aversión al riesgo, opta por productos que te den una rentabilidad fija.
En cualquier caso, siempre es recomendable diversificar la cartera de inversión, esto es, repartir tus ahorros entre diferentes cestas para equilibrar el riesgo total de la cartera.
La forma menos riesgosa de invertir tus ahorros es con productos de renta fija. Tienes diferentes opciones.
La deuda pública son títulos que emite el Gobierno español para financiarse. En concreto, los Bonos del Estado son a medio y largo plazo, mientras que las Letras del Tesoro tienen un vencimiento a tres, seis, nueve y 12 meses. Ambas opciones son de bajo riesgo y aptas para inversores con poca experiencia.
Otra opción para invertir tus ahorros con bajo riesgo son los depósitos a plazo fijo. En este caso, prestas tu dinero a un banco a cambio de un tipo de interés que conoces de antemano. Cuando finalice el plazo establecido, recuperas tu capital y los intereses.
Por ejemplo, si contratas un depósito a un año con un 4 % TAE y depositas 100.000 €, después de 12 meses obtendrás un beneficio de 4.000 €. Además, conoces de antemano la rentabilidad que vas a obtener.
Tanto las cuentas de ahorro como las cuentas remuneradas son otra opción que puedes considerar si quieres invertir tus ahorros con bajo riesgo. Al igual que los depósitos a plazo fijo, son productos de ahorro en los que conoces el beneficio en el momento de la contratación, aunque en este caso la TAE es variable. Asimismo, tienen un indicador de riesgo de 1 sobre 6, y hasta 100.000 € por depositante y banco están protegidos por el Fondo de Garantía de Depósitos nacional.
A diferencia de una cuenta corriente, una cuenta de ahorro te remunera por tus ahorros de manera regular.
Invertir en fondos de inversión tiene varias ventajas: son una forma fácil de diversificar y contratando uno puedes tener varios productos de renta fija en tu cartera. En concreto, en los fondos de inversión de renta fija la mayoría de los activos son de renta fija, por lo que es una forma de invertir tus ahorros con bajo riesgo.
Por otro lado, los fondos de inversión tienen una fiscalidad ventajosa. A modo de ejemplo, si tienes participaciones en un fondo de inversión inmobiliaria y decides mover tu dinero a otro fondo, no tendrás que pagar impuestos. Es decir, solo se tributa al hacer el reembolso.
Ahora que ya sabes dónde invertir tus ahorros con bajo riesgo, quizá te estés preguntando cómo hacerlo. La respuesta depende del producto de ahorro o inversión que hayas contratado.
Si has optado por depósitos y cuentas de ahorro, tendrás que contratarlos en un banco que los ofrezca. Actualmente, en Raisin puedes acceder a depósitos a plazo fijo y cuentas de ahorro de bancos europeos y españoles con hasta un 2,80 % y un 3,33 % TAE.
Por otra parte, para invertir en un fondo de inversión puedes hacerlo a través de la gestora o entidad que lo ofrezca. También puedes invertir tus ahorros con un robo advisor, un gestor automatizado con carteras personalizadas según tu perfil de inversor.
Por último, para comprar deuda pública tienes dos opciones: el mercado primario, en una oficina del Banco de España o en el servicio de compraventa de valores del Tesoro Público; o el mercado secundario, bancos, cajas, sociedades y agencias de valores.
¿Quieres recibir noticias y artículos de actualidad financiera? Únete a nuestra newsletter.
Los siguientes consejos pueden ayudarte a la hora de invertir tus ahorros:
No hay una cantidad mínima establecida, y en muchos tipos de inversión podrás empezar a invertir desde solo un euro.
No hay un plazo que sea mejor que otro, depende de tus objetivos de inversión y de tu perfil de inversor.
Los impuestos varían según el tipo de inversión. Por lo general, las ganancias se añaden a la base imponible del ahorro de la declaración de la Renta, que tiene tipos impositivos del 19 al 30 %.
Sí, a través de la banca electrónica que te permite invertir siempre y cuando tengas conexión a Internet.