¿Es rentable invertir en oro?

• Activo refugio: mantiene su valor cuando hay crisis económicas o inestabilidad política.
• Protección: su precio suele subir cuando los precios de los bienes y servicios aumentan. Del mismo modo, mantiene su valor cuando la moneda local pierde valor. Por tanto, protege frente a la inflación y la depreciación de divisas.
• Diversificación: es una opción para diversificar tu cartera de inversión, pues su rentabilidad no se correlaciona fuertemente con acciones o bonos.
• Liquidez elevada: es fácil de comprar y vender en casi cualquier país.
• Oferta limitada: el oro es limitado, lo que ayuda a preservar su valor a largo plazo.
• Demanda alta: se usa en joyería, industria y como reserva de los bancos centrales.

• Opciones de inversión variadas: hay varias formas de invertir en oro, por ejemplo, comprar oro físico, ETFs o acciones.

• Liquidez. El oro físico suele tener alta liquidez, ya que se puede comprar y vender fácilmente en muchos mercados.

• Mantiene su valor. El oro tiende a mantener su valor en el tiempo y a ser más estable que otros activos financieros. Por este motivo, suele considerarse como un refugio seguro para proteger el capital.

• Cobertura contra la inflación. El precio del oro suele comportarse de forma diferente a los precios de otros activos en periodos de inflación, aunque puede variar según el contexto económico. Y como se expresa en dólares estadounidenses, una depreciación del euro suele reflejarse en un precio del oro más alto.

• Diversificación. Agregar diferentes valores a la cartera de inversión es esencial para reducir el riesgo total. El oro suele moverse en sentido contrario a muchos valores bursátiles y monetarios, lo que contribuye a diversificar una cartera.

• Inversión universalmente deseada. El oro es una mercancía aceptada globalmente y suele verse menos afectado por los cambios políticos que otros activos.

• El oro se usa como material en distintos productos. Se utiliza en sectores como la joyería y la electrónica, lo que contribuye a sostener su demanda y, en algunos casos, puede influir en su precio.

• El oro no genera ingresos pasivos. Otras inversiones pueden darte unos intereses o dividendos. Sin embargo, el rendimiento del oro solo se materializa si su precio sube y decides venderlo.
• El oro puede crear una burbuja especulativa. Cuando la economía es inestable, muchas personas comienzan a invertir en oro. Pero esa inversión podría perder valor una vez que los inversores cambien de opinión y el precio se corrija.
• Necesita un almacenamiento físico y seguro. Si decides comprar oro físico real, no solo tendrás que almacenarlo, sino también asegurarlo. De lo contrario, no podrás reemplazarlo si se daña o lo roban.
• La compraventa de oro debe reflejarse en la declaración de la Renta y tributa por su revalorización, al igual que lo haría un fondo cotizado por las ganancias obtenidas. Por otra parte, al invertir en lingotes de oro estarás eximido de pagar el IVA, ya que cumple el régimen político fiscal de la Unión Europea.
• El oro suele apreciarse en contextos de inflación o pérdida de valor de la moneda local.

Muchas personas barajan el oro como inversión cuando se espera que aumente la inflación o que la moneda pierda valor. Identificar estas tendencias ayuda a entender mejor el contexto del mercado, aunque la evolución del precio del oro puede variar.

Los principales indicadores, como la caída del mercado de valores y la inestabilidad política, suelen implicar una futura devaluación de la moneda del país. Otro indicativo de que es un buen momento para invertir en oro es cuando el banco central anuncia que va a imprimir más dinero.

Por otro lado, cuando el valor monetario es fuerte y no se espera que haya una inflación a corto plazo, no hay mucho margen para que suba el precio del oro. Dicho esto, si hay expectativas de una mayor demanda de los mercados que requieren oro, como joyas y productos electrónicos, puedes considerar la inversión en oro para beneficiarte de la presión potencial de los precios.

No obstante, algunas personas optan por estrategias pasivas de compra y retención para reducir la necesidad de ajustar su cartera con frecuencia. Dado que las economías tienden a ser cíclicas, es mejor comprar cuando el precio del oro baje. Así, no tendrás que preocuparte cuando los demás decidan comprar y el precio suba.

Si estás pensando en utilizar el oro como inversión, lo primero que debes saber es que hay varias opciones para hacerlo. Elegir una u otra dependerá de la modalidad que sea más acertada para tus circunstancias: 

• Comprar oro directamente. Puedes adquirir oro directamente en forma de lingotes o monedas. Es la manera más tradicional de invertir en oro, aunque entraña más riesgo al poder extraviarse o incluso ser robado. Si deseas mantenerlo a salvo, tendrás que pagar un seguro específico.
• Adquirir acciones de una empresa que se dedique a la venta del oro. La segunda opción es comprar acciones de una empresa que produzca oro. Aunque no es una inversión directa en oro, el valor de las acciones estará fuertemente correlacionado. Al mismo tiempo, lo que ocurra en las minas de extracción de oro también tendrá un impacto directo sobre su valor.
• Mediante contratos de futuros del oro. Puedes invertir en oro a través de derivados financieros especializados en inversiones en oro.
• Invertir en un ETF de oro. Es decir, en un fondo que cotice en bolsa especializado en la gama de valores de oro. Esta diversificación puede minimizar un poco su riesgo. 
  

Antes de invertir en oro, conoce en profundidad el tipo de inversión que has elegido y el valor del oro en ese momento. Además, ten en cuenta cuánto te costará exactamente almacenar y asegurar el oro físico y los impuestos que pagarás.

Por último, cabe destacar que hay otros factores que influyen directamente en la rentabilidad de invertir en oro, como el momento de la compra y de la venta, sobre todo si no adquieres oro físico. Sin duda, entender todos esos detalles de la inversión te ayudará a ver si es rentable invertir en oro o no.

Ahora que ya sabes cómo invertir en oro y las diferentes opciones para hacerlo, si te planteas invertir en esta materia prima, es importante conocer los riesgos y particularidades de cada modalidad antes de tomar una decisión.

Si no estás convencido, puedes optar por contratar depósitos bancarios y cuentas remuneradas que te den intereses por tus ahorros. Estos productos bancarios tienen un indicador de riesgo de 1 sobre 6 y hasta 100.000 € por depositante y banco están protegidos por el Fondo de Garantía de Depósitos del país en el que contrates el producto.

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• Banco de España,
• CNMV,
• ESMA,
• World Gold Council.